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Operaciones
La educación es una de las áreas
esenciales de TaiwanICDF, considerada
como lo prioritario para impulsar
los proyectos de ayuda. Su objetivo
es ayudar a los países socios en la
construcción del capital humano.
Los Talleres Profesionales se centran
en las necesidades de los países
socios y se organizan acompañando
a los proyectos cooperativos. En ello
se aprovechan los recursos de la
educación superior en Taiwán para
proporcionar becas completas a los
ciudadanos talentosos de los países
socios. El Programa Internacional de
Becas ha formado muchos recursos
humanos profesionales a lo largo de
los años, y cumple un papel importante
en el desarrollo nacional de los países
amigos.
Jean Prosper, quien trabaja en el
Ministerio de Agricultura de Haití, es uno
de los beneficiarios del Programa de
Becas y de los Talleres Profesionales; en
este momento colabora con TaiwanICDF
en la promoción del Proyecto de
Desarrollo de Cultivos de Granos en el
Valle Les Cayes (Haití) y del Proyecto de
Mejora en la Producción de Semillas de
Arroz.
Beneficiarse de los recursos
educativos de Taiwán para mejorar
la capacidad y la profesionalidad
Hace 16 años, por recomendación
del Gobierno de Haití, Jean Prosper
consiguió la beca de TaiwanICDF y
vino a Taiwán a estudiar un máster en la
Universidad Nacional de Pingtung de
Ciencias y Tecnología. Se especializó
en el estudio sobre cómo aumentar
la producción de semillas de arroz
mediante fertilizantes químicos. Al
regresar a su país, el Ministerio de
Agricultura de Haití le designó un cargo
para que trabaje en colaboración con la
Misión Técnica de Taiwán en el país.
A lo largo de estos años, ha puesto
en práctica sus conocimientos, y a
menudo, elabora propuestas originales
e integradas a la agronomía de manera
muy profesional. El hecho de haber
vivido dos años en Taiwán le permitió
comprender la cultura y la forma de
pensar de los taiwaneses. Como
consecuencia, está acostumbrado a
la administración al estilo taiwanés y
las actitudes hacia el trabajo. Cuando
surgían diferencias de opiniones entre
los equipos de trabajo de ambos
países, funciona como mediador
y ayuda a conseguir consensos
comunes entre las dos partes. “El
Programa de Becas ha ayudado a
agricultores como yo, que tienen una
buena educación básica, pero no
disponen de recursos económicos
para profundizar en el estudio.
Perfeccionando los conocimientos y
competencias profesionales, al regresar
al país, podemos contribuir a la mejora
del país y ganarnos la vida. Además,
en el camino de la colaboración con
TaiwanICDF, he dedicado la mejor
época de mi vida a los proyectos de
cooperación entre Taiwán y Haití. Me
siento muy feliz al ver que estamos
consiguiendo, poco a poco, los
resultados positivos en el desarrollo
alimentario”.
Tras más de una década, con el
fin de perfeccionar su especialización
para la ejecución del proyecto, Jean
Prosper vino otra vez a Taiwán a recibir
la capacitación en un taller durante julio
de 2014. Este taller trataba sobre la
gestión de las semillas de arroz, y tenía
una duración de dos semanas. En total,
19 participantes de 13 países recibieron
esta misma capacitación; la mayor
parte eran funcionarios de mando
medio y alto que se encargaban del
desarrollo de las políticas de semillas
de arroz, o eran directivos implicados
en algún proyecto relativo a lo mismo.
Investigadores e instituciones agrícolas
de Taiwán fueron invitados a participar
en el taller para contar la historia sobre
el desarrollo de las normas regulatorias
de las semillas de arroz y la situación de
su implementación actual; por otro lado,
también compartieron las experiencias
sobre el suministro y la comercialización
de las semillas de arroz de calidad a
través de plataformas de información.
Asimismo, los alumnos realizaron
visitas a las entidades nacionales
dedicadas a llevar a cabo las pruebas
e investigaciones y de esta manera
pudieron comprender cómo se utilizan
los recursos gubernamentales en el
incremento de la cantidad y la calidad
de la producción de arroz.
Dijo Jean Prosper desde el corazón:
“Al volver a Taiwán, puedo ver que el
país ha progresado con tanta rapidez
y me inspiró mucha confianza. Quiero
perfeccionarme otra vez con este
taller, pensar sobre las formas de
mejorar la producción de las semillas
de arroz. Si queremos alcanzar un
desarrollo sostenible, únicamente lo
vamos a conseguir usando semillas
de arroz de alta calidad, y establecer
el procedimiento y la normativa para
su control y supervisión. Al tener esta
conciencia y preparación, una vez
completados los objetivos establecidos
por la Misión Técnica de Taiwán, los
productores haitianos podrán continuar
el proyecto y generar los resultados
positivos del mismo. Así vamos a tener
más esperanzas para el futuro”.
Jean Prosper, coordinador técnico del Ministerio de
Agricultura de Haití
Desarrollar la especialización con el
Programa de Becas, perfeccionarla con los
Talleres Profesionales
Entrevista
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